Los geranios son plantas de exterior muy resistentes y tienen la capacidad para crecer en diferentes climas, siempre que se les proporcione una gran cantidad de luz y un suelo bien drenado para evitar que se encharquen. Estas características, unidas a su gran belleza, hacen que sea una planta muy común, ya que incluso en zonas donde la temperatura es elevada, puede crecer sin demasiados problemas.
Estas plantas perennes destacan por sus hojas dentadas y aromáticas, así como por sus flores llamativas que pueden presentar una amplia gama de colores, desde tonos vibrantes como el rojo y el rosa hasta tonalidades más suaves como el blanco y el lavanda.
Índice de contenidos
- ¿Qué tipos de geranios existen?
- ¿Qué plagas atacan a los geranios?
- ¿Cuáles son las enfermedades más comunes?
- ¿Cuánta luz necesitan los geranios?
- ¿Cuántas veces hay que regar los geranios?
- ¿Cuándo se abonan?
- ¿Qué tipo de fertilizantes necesitan?
- ¿Cuáles son los cuidados de los geranios en macetas?
- ¿Cuándo se podan los geranios?
- ¿Cómo hacer para que florezcan los geranios?
- ¿Los geranios repelen los mosquitos?
¿Qué tipos de geranios existen?
Antes de entrar en materia, debemos tener en cuenta que hay muchos tipos de geranios, y cada uno con sus propias características únicas, lo que los convierte en opciones versátiles para jardines, balcones y macetas. Algunos de los tipos de geranios más comunes son:
Geranio común o zonal: Este tipo de geranio se distingue por el característico anillo oscuro en el centro de las hojas, que le da el nombre de «zonal». Presentan una amplia variedad de colores, que van desde tonos rojos y púrpuras intensos hasta blancos y rosados más suaves.
Geranio gitanilla: Este tipo de geranio, también conocido como geranio hiedra, presenta ramas flexibles que se extienden en cascada, creando un efecto visual impresionante. Sus hojas verde brillante, con una forma similar a la hiedra, añaden un toque de frescura al follaje.
Geranio pensamiento: Este geranio híbrido se destaca por sus grandes y llamativas flores. Recibe este nombre por su parecido con las flores de pensamiento. Las flores del geranio pensamiento pueden encontrarse en una amplia paleta de colores, desde tonos suaves y pastel hasta colores más intensos y vibrantes.
Geranio citronela: Las hojas del geranio citronela desprenden un fuerte aroma a limón cuando se frotan o se agitan, gracias a los aceites esenciales que contienen, como el citronelol y el geraniol.
Aunque existan gran variedad de geranios, la mayoría comparten unas características similares entre ellos, por lo que en este artículo trataremos veremos trataremos el cuidado de los geranios en general.
¿Qué plagas atacan a los geranios?
Un aspecto importante a tener en consideración en cuanto al cuidado de los geranios es su posible exposición a diferentes plagas. Algunas de las plagas que atacan a estas plantas son:
Polilla del geranio o taladro de geranio: Conocida también como mariposa africana, estos indeseables aparecen cuando las temperaturas superan los 20 grados. Pueden ser un gran dolor de cabeza, ya que son muy difíciles de detectar. Esta mariposa deja sus huevos en los capullos del geranio, y cuando las larvas eclosionan, se alimentan del capullo para luego introducirse en el tallo de la planta. Sin duda este es la principal amenaza del geranio, por lo que es muy recomendable usar insecticidas preventivos para evitar que nuestro geranio sea atacado por esta plaga
Pulgones: Son pequeños insectos que se alimentan de la savia de las plantas. Se encuentran comúnmente en los brotes tiernos y en la parte inferior de las hojas. Los síntomas incluyen hojas enrolladas, amarillentas o pegajosas. Controlar los pulgones puede hacerse mediante la introducción de enemigos naturales, como mariquitas, o mediante el uso de insecticidas suaves.
Araña Roja: Estos diminutos ácaros son difíciles de ver a simple vista, pero sus efectos son evidentes en forma de manchas amarillas y tejido foliar descolorido. La araña roja prefiere ambientes cálidos y secos, por lo que mantener un nivel adecuado de humedad y rociar con agua regularmente puede ayudar a prevenir su proliferación. También existen insecticidas específicos para controlar las arañas rojas.
Trips: Son insectos alados pequeños que se alimentan de las células de las hojas, dejando manchas plateadas o bronceadas. Las infestaciones severas pueden hacer que las hojas se vuelvan amarillas y caigan. Controlar los trips implica mantener el área alrededor de los geranios limpia y utilizar trampas adhesivas o insecticidas específicos.
Orugas: Pueden dañar seriamente los geranios al alimentarse de las hojas y flores. Identificar y retirar manualmente las orugas es una estrategia efectiva. Además, el uso de insecticidas biológicos o de baja toxicidad puede ayudar a controlar las poblaciones de orugas sin dañar demasiado el entorno.
Caracoles y babosas: Estos moluscos pueden ser una amenaza, especialmente en climas húmedos. Se alimentan de las hojas y pueden dejar un rastro viscoso a su paso. El control de caracoles y babosas implica la eliminación manual, el uso de barreras físicas como bordes afilados alrededor de las plantas, o el empleo de cebo específico.
Para prevenir la aparición de plagas, procura mantener tu jardín limpio y eliminar las malas hierbas, de esta manera evitaremos que tengan lugares donde refugiarse. Asimismo, cuida el nivel de riego. Un ambiente muy húmedo propicia la aparición de ciertos agentes indeseados.
¿Cuáles son las enfermedades más comunes?
Algunas de las afecciones más comunes que pueden afectar a estos cultivos son:
Moho gris: Esta enfermedad fúngica se manifiesta con manchas descoloridas en las hojas y una capa grisácea de esporas en la superficie. Suele prosperar en condiciones húmedas. Para prevenir el moho gris, es crucial mantener una buena circulación de aire y evitar el riego excesivo.
Mancha bacteriana: Se caracteriza por manchas negras o marrones en las hojas y tallos. Esta enfermedad bacteriana puede propagarse rápidamente en climas húmedos.
Mildiú polvoriento: Se presenta como un polvo blanco en las hojas, causando debilitamiento y deformación. Suele ocurrir en condiciones secas. Rociar con agua para aumentar la humedad y seleccionar variedades resistentes son estrategias útiles para combatir esta enfermedad.
Fusariosis: Este hongo patógeno ataca el sistema vascular de la planta, causando marchitez. Las hojas se vuelven amarillas y caen prematuramente. Para prevenirlo, mantén un buen drenaje del suelo y evita que se acumule mucha humedad.
Virosis: Las enfermedades virales, como el mosaico, pueden afectar a los geranios, manifestándose en patrones de color distorsionados en las hojas. La prevención implica eliminar las plantas afectadas y controlar la presencia de insectos, ya que pueden portar esta enfermedad.
¿Cuánta luz necesitan los geranios?
Los geranios necesitan una buena cantidad de luz solar. Para un crecimiento óptimo de las flores, los geranios deben estar expuestos de 6 a 8 horas diarias de luz directa del sol. Si vives en una zona muy cálida, intenta que tengan la luz del sol por la mañana y sombra parcial durante las horas más intensas del día.
¿Cuántas veces hay que regar los geranios?
En verano, conviene regar los geranios cada dos o tres días, mientras que en invierno es suficiente si se riegan desde cuatro hasta siete días.
Ten en cuenta que esto puede variar un poco dependiendo del clima de donde vives. Antes de regar, comprueba que el suelo no está húmedo.
Los geranios no necesitan mucha agua. Asegúrate de que el suelo esté húmedo, pero evita el exceso de agua, ya que esto dañará a la planta.
Otro factor a tener en cuenta al regar los geranios es el tamaño de la maceta. Las macetas de mayor tamaño retienen más agua, por lo que los geranios que estén en macetas grandes requerirán una frecuencia de regado inferior.
¿Cuándo se abonan?
Los geranios se abonan durante la temporada de crecimiento, que generalmente abarca la primavera y el verano. Durante este tiempo, la planta está activamente produciendo follaje y flores. Evita abonarlos durante el otoño y el invierno, ya que están en una etapa de descanso o de crecimiento más lento.
En cuanto a la frecuencia de abono, es conveniente hacerlo cada cuatro o seis semanas.
¿Qué tipo de fertilizantes necesitan?
Se debe usar un fertilizante con una proporción balanceada de nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K), como el 10-10-10 o el 14-14-14.
Este fertilizante puede ser soluble en agua o granulado. Es importante que leas las instrucciones de uso para evitar dañar a la planta.
¿Cuáles son los cuidados de los geranios en macetas?
Los cuidados de los geranios en maceta son prácticamente los mismos que los del jardín. Necesitan de 6 a 8 horas de luz solar directa, y poca cantidad de agua. Eso sí, asegúrate de que la maceta tiene un buen drenaje y que tiene un diámetro de al menos 30 o 35 centímetros.
¿Cuándo se podan los geranios?
La poda de los geranios suele llevarse a cabo en otoño. Es recomendable rotar las ramas más delgadas y débiles, cortándolas desde la base, de esta forma los nuevos brotes crecerán más fuertes. Aprovecha este momento para aplicar el insecticida contra la polilla del geranio para evitar sorpresas desagradables en el futuro.
Aunque la poda principal de la planta deba hacerse en otoño, es buena idea ir quitando las flores y hojas secas cuando estas vayan apareciendo en verano.
¿Cómo hacer para que florezcan los geranios?
Es posible que un geranio no florezca si no tiene suficiente luz, tiene demasiada agua o ha sido afectado por alguna plaga. Recuerda que estas plantas necesitan de una gran cantidad de luz, y que mucha agua les hace más mal que bien. Procura también no abusar con el uso de fertilizante. Sigue las instrucciones del fabricante para tener un crecimiento óptimo.
¿Los geranios repelen los mosquitos?
¡Sí! En particular, el geranio citronela es conocido por su capacidad para repeler mosquitos. Estas plantas emiten un aroma cítrico que actúan como repelente para mosquitos y otros insectos.
Para aprovechar las propiedades repelentes de los geranios citronela, puedes colocar estas plantas en áreas al aire libre donde pasas tiempo, como patios, terrazas o jardines.
Como hemos visto, los geranios son bastante fáciles de cuidar, por lo que los hace una planta ideal para los más principiantes. Sólo asegúrate de proporcionarle bastante luz, no demasiada agua, y vigilar a su principal enemigo: la polilla del geranio. Siguiendo todos estos consejos, tus geranios lucirán espectaculares.
